EL SOL
El propósito de esta reflexión no es reemplazar ni contradecir los fundamentos de la astrofísica, sino proponer una lectura simbólica y espiritualista que permita ampliar la comprensión del fenómeno solar en su dimensión esencial desde la perspectiva filosófica Universalista.
Reconociendo el rigor que la ciencia exige en sus métodos, el texto introduce analogías entre la atracción gravitatoria del Sol y un Principio Espiritual que denominamos Atracción Crística, entendido como una Fuerza de Unificación Evolutiva que impulsa a los seres hacia su origen Divino. Estas analogías no se presentan como hipótesis científicas estrictas, sino como herramientas de meditación y construcción de Sentido Espiritual que respetan plenamente los principios físicos conocidos.
La idea de que el Sol puede ser considerado tanto una fuente de energía física como una manifestación de energía espiritual no busca establecer equivalencias empíricas, sino ofrecer un puente entre los planos de interpretación que, desde distintas miradas, intentan comprender la totalidad de la existencia.
Sabemos que el Sol es la Fuente de Energía para nuestro sistema solar, el grueso de la masa del sol está conformado por hidrógeno, el segundo elemento mayoritario de su constitución física es helio y minoritariamente se encuentran presentes en el mismo los siguientes elementos, oxígeno, carbono, nitrógeno, neón, hierro, silicio y otros.
El hidrógeno es el combustible solar, el que debido a la atracción gravitatoria que ejerce su núcleo hacia su centro, comprime sus átomos con una fuerza descomunal, generando una reacción de fusión nuclear que libera energía y helio. Dicha reacción se sostiene de manera permanente por milenios en constante Irradiación de energía hacia los planetas que orbitan a su alrededor. A su vez, el sol ejerce fuerza gravitatoria sobre los planetas que de él emergen, atracción que en función de la masa de los mismos determinada su órbita.
En relación a la energía que requieren los planetas podemos meditar los siguientes párrafos del Conocimiento Espiritual de Madú Jess:
“La Energía Universal que “Reclaman” los aspectos físicos, es decir los aspectos de “forma” en los Planetas de un Sistema, la reciben desde el Sol respectivo y este, a su vez, desde el Cristo “Directo”.”
“La Energía Universal “desciende”, así, en Escala Crística y desde el Cristo “Directo” es Proyectada al Sol, que proyecta la Energía Universal “Reclamada”, que, tras las sucesivas “adaptaciones”, la última en el propio Sol, es recibida por los aspectos de “forma” en los Planetas de su Sistema en el “punto” exacto que dichos aspectos de “forma” la necesitan.”
Ahora veamos en el siguiente párrafo de las Fuentes del Conocimiento de Madú Jess la Esencia Espiritual de los Soles:
“El conjunto de vibraciones que encierran determinadas fuerzas, cuya manifestación puede ser física o espiritual, es lo que determina, a través de los milenios, núcleos que, dentro de la Voluntad Divina, están destinados a conformar sistemas planetarios. Estos núcleos son los que, siguiendo la Voluntad de Dios expresada en Sus Leyes, se transforman en Focos de Irradiación y de Atracción de Fuerzas; de todas las Fuerzas necesarias para la realización del Plan Divino al conformar esos sistemas planetarios que deberán recibir la vida de ese punto central que viene a conformar el Sol del cual dependen.”
“En la formación de nuestro mundo, el Sol ha tenido una acción importantísima y su acción continúa a través de los milenios. El Sol tiene acción física en nuestra Naturaleza y en el aspecto físico del ser humano, y tiene Acción Espiritual en la Vida que Vibra en nuestra “forma” humana.”
Podríamos hipotetizar, qué la atracción gravitatoria que el núcleo del sol ejerce hacia Si, y qué es la fuerza por la cual se produce la fusión nuclear de los átomos de hidrogeno que libera la energía que sostiene la vida en los planetas, es la Manifestacion física o mínimamente está relacionada, con la Atracción Espiritual en Acción-Amor que ejerce el Cristo Directo sobre todos los seres del cual es Guía Tutelar.
La Divinidad que nos creó, atrae a todos los seres hacia Si, en cada ser esa Atracción se manifiesta en el Impulso a la Reintegración a la Divinidad que nos conduce a evolucionar que como meta final significa asimilarse a la Unidad Dios. A su vez y tal como figura en la Fuentes del Conocimiento de Madú Jess, desde la Divinidad, desde sus Aspectos Divinos más Elevados e Increados, somos percibidos como infinitesimales en Cristo en tránsito de Evolución y se entiende que esa Atracción Divina se Manifiesta como Atracción Crística.
Siendo el sol la Manifestacion física del Cristo Directo, consideramos que la Atracción Gravitatoria ejercida en el núcleo del sol, podría estar relacionada a la existencia de lo que podríamos denominar como Principio Universal de Unificación en Amor (Manifestacion de la Ley del Amor Universal), a su vez tambien relacionado con la Atracción que ejerce la Divinidad a través del Núcleo Crístico Directo a todos los seres que Guía.
Vimos en anteriores documentos, que el Universo al Evolucionar y Ascender de Plano tiende a la Máxima Unificación en Amor, cuya Máxima Manifestacion es la Divinidad que es el Principio y fin de todo lo que existe, por lo tanto entendemos que Unificación y Atracción hacia Si es una realidad Primogénita que la podemos percibir en el mismo fenómeno por el cual el Sol cumple en lo físico su finalidad Divina.
Veamos ahora en los párrafo siguiente lo que las Fuentes del Conocimiento de Madú Jess mencionan al respecto de la Atracción que ejerce el Sol:
“La Fuerza de Cristo, en su manifestación física para la realización, mantención y progreso de la vida física en vuestro planeta, se proyecta a través del Sol, así pues, el Sol no es un astro físico, lo es desde vuestro punto de vista físico y por su manifestación física en vuestro plano físico, pero el Sol es en realidad un Astro Espiritual cuyas Fuerzas Creadoras se proyectan intensamente sobre todos los mundos y hay muchos más mundos que los que vosotros conocéis que están dentro de su radio de acción, tanto en lo que respecta a su proyección como a su atracción, porque así como el Sol proyecta su fuerza, así también os atrae y es por ello que todos los mundos que corresponden a su órbita de atracción y de irradiación tienen un movimiento alrededor de ese punto que constituye el Sol.”
“El Sol pues envía la expresión física de la Fuerza Espiritual de Cristo en Energías diferentes que son necesarias para la evolución de la vida física en vuestro plano, pero también el Sol os envía Vibraciones y Energías Espirituales intensísimas, imprescindibles para la vida de los Seres espirituales que deben trabajar y vivir como seres humanos en este mundo. El Sol, pues, debe considerarse desde el punto de vista físico y desde el punto de vista Espiritual como Fuente de energía física para la parte física de vuestra vida manifestada en este mundo y es Fuente de Energía Espiritual para todo lo que representa la parte netamente Espiritual de la manifestación de la vida en vuestro mundo.”
“Como existen diferentes planos, vale decir, mundos en diferentes puntos de evolución dentro de lo que conforma el sistema solar, las fuerzas irradiadas por el Sol, Espiritual y físicamente son absorbidas de diferentes formas en cada plano, de acuerdo a su propia necesidad. No varía la irradiación varía la capacidad de absorción, la capacidad de lo que podría llamarse “interpretación” de la misma fuerza proyectada sobre los diferentes planos en los cuales viven los diferentes mundos.”
Al margen de si la hipótesis tenga realidad dentro de los parámetros de la Ciencia Divina y la humana, lo mencionado hasta aquí nos indica que, cuando miramos al sol, podemos buscar percibir que esa Inmensa Fuente de Energía es la Manifestación Física del Poderoso Foco Espiritual que nos acompaña en las experiencias diarias para Ser en Divinidad y que es el Núcleo Crístico Directo.
Lo mencionado significa que estamos tan lejos del Cristo y de la Divinidad, como nosotros nos infravaloremos en nuestras creencias al respecto de nosotros, mismos, derivadas de una humana y deformada, percepción humana….. porque en realidad estamos tan lejos del Cristo, vale decir de la Divinidad, como de poder sentir el calor del sol o ver entrar un rayo de su luz por la ventana en nuestra propia vivienda.
Si una manada de lobos pasa horas conectándose y recibiendo energía del sol en un estado interior de adoración o un águila, hace vuelos simbólicos en torno a la dirección de donde provienen los rayos del sol……Nosotros podríamos hacer igual o más si trascendiéramos las limitaciones que nos auto imponemos por una excesiva actividad racional deformante de la percepción espiritual.
La consciencia humana anclada la materia, es la fuente de toda limitación para alcanzar a percibir los Principios Esenciales de la Existencia Divina manifestados en nuestro cosmos y en todo aspecto de nuestra vida humana.
Un proceso físico esencial para nuestra vida en el cosmos, puede ser Fuente de una amplia meditación sobre la Existencia Universal, de la misma manera, cualquier experiencia humana, colectiva, grupal o personal…… tiene implícita en sí misma, una Realidad Divina, porque es una experiencia conducente de nuestro espíritu en su Retorno hacia la Divinidad.
El cono de sombra de nuestras falsas creencias derivadas de nuestra autopercepción material, es la matriz que utiliza el orden negativo de la existencia para impedirnos conectarnos con la Luz Divina Espiritual.
Lo mencionado es una imperceptible acción, sutil negativa, que incluso abraza a seres con muchísimo Conocimiento Espiritual y que tiene que ser trascendida para que se corran los velos que impiden conectarnos con la Divinidad. Nuestro Aspecto Espiritual Esencial tiene que ser la Fuente de nuestra dinámica interna y de relación humana.