LA DIVINIDAD, EL CONCEPTO DE LA UNICIDAD DIVINA

En nuestra serie de libros anteriores (Aspectos transpersonales del Libro I al V) mencionamos el concepto de Unicidad Divina, lo definimos como la máxima unificación en el Amor Divino Universal que constituiría aquello de la Evolución Divina Infinita que no nos es posible comprender y que es evolutivamente jerárquico a los niveles Crísticos, niveles estos que son definidos en el conocimiento avanzado de Madú Jess. En dichos textos, para profundizar el concepto de la Unicidad Divina, partimos de la definición de Dios de Buda la cual cita que: “Dios, es el conjunto unificado de todas las Inteligencias llegadas a la Suprema perfección del Nirvana”. La Unidad-Dios no es individualidad, sino unificación, sin que la Individualidad se pierda, tal como analizamos en apartados anteriores con relación a la Reintegración a la Divinidad Una.


Lo antes mencionado significa que la Divinidad es un Conjunto Unificado de Núcleos Infinitos de Seres, que tienen Identificadas sus Vibraciones con la Energía Divina, Identificación que se incrementa de manera Infinita y Eterna, en lo que podríamos denominar Evolución en los márgenes de la Divinidad.


Podría hipotetizarse para tener un concepto aproximado de comprensión del más allá de la Evolución Divina Infinita, como que la misma es análoga, en una superflua comparativa para su comprensión, a dos límites matemáticos en que uno tiende al Uno en el sentido de Unificación e identificación máximas con la Energía Divina y que el otro tiende a infinito en el sentido de que nunca cesa dicha Evolución.


Nosotros inmersos en el ciclo evolutivo de experiencias, desde nuestra limitada percepción y comprensión, podemos percibir la Unicidad Divina como un punto de Unificación máxima, absoluto, omniabarcante e incomprensible, como un horizonte Divinizado Increado que Es el Foco Amor Incognoscible del cual surge todo lo creado y anterior a todo lo percibido espiritualmente y que es la Fuente Universal de todo cuanto existe, pero en su Realidad Existencial, cada Aspecto Jerárquico de la constitución de ese punto u Horizonte Divino, Es Realidad Vivencial para aquellos Soles Universales que ahí actúan en Acción-Amor.


De acuerdo a lo recién mencionado, sería en realidad un Centro (Entendiéndose en términos de la definición simbólica y filosófica de Centro Espiritual), un escenario sucesivo e infinito de Acción-Amor Universal conjunto que nutre y se proyecta hacia todo lo existente y que a su vez, desde cada punto o nivel de su constitución, tiene ascensionalmente un Infinito Evolutivo Divino que es infinitamente percibido de igual manera a medida que se evoluciona, ósea que siempre existe eternamente un Horizonte Universal Ascendente incognoscible en cada punto de la Evolución Divina.


Lo mencionado equivale a comprender que la Unicidad Divina es una realidad inmanente presente en la misma Divinidad también, que nunca deja de existir porque la Evolución Divina nunca cesa, así como nunca cesa la Unificación y la Identificación con el Amor Divino Universal que constituye el principio inmanente de todo lo que existe. Cabe señalar que no poseemos los atributos mentales ni la capacidad evolutiva para poder percibir esos estratos Universales, ni mucho menos es posible trasmitirlos a través de un lenguaje, estas son hipótesis interpretativas superfluas y transitorias que buscan ampliar la comprensión hacia una orientación Universal de la Vida de pensamiento holístico.


Muchos podrán afirmar “quienes son ustedes para intentar definir lo indefinible” y para ello existe el mismo cuestionamiento que existe hacia el oscurantismo que analiza las opiniones de otros desde el “no se puede”, desde la ausencia de reflexión interna y desde el no considerar la existencia de movimiento continuo en la vida, en las ideas, en los conceptos y en la realidad. Mientras se esté abierto a transformar los conceptos personales al recibir la luz que otorga sabiduría, un ser puede pensar lo que interprete de la realidad Universal, siempre y cuando sea consciente que todo concepto en relación con ello es transitorio. La ausencia de análisis, de pensamiento elevado o la comunicación deficiente produce entropía en la vida humana, genera fuerzas internas restrictivas. Quien se atribuye algún rol que detiene la meditación del Conocimiento actúa sin lugar a duda en contra de la Ley, impidiendo así la adaptación necesaria de las ideas a la evolución de los tiempos, de las mentes y de las almas.

En esa Elipse inmanente que es la Fuente Universal del Todo, que es adonde se funden y sumergen las Gemas Cristicas en su horizonte evolutivo Divino y que van transformándose en Padres Divinos Universales, en Soles Unificados del Amor Universal Absoluto, en Fuerza viva conjunta, que sin perder la individualidad, constituyen los granos de la arena de la Mente Divina Universal, es desde donde surge todo aquello que es anterior al Todo mismo e incluso anterior a todo aquello que para nosotros es lo Omnipresente, Omniabarcante y lo Divino que comprendemos desde nuestro modo de existir y percibir a la Divinidad.

Desde ese punto Inmanente surgiría Todo lo que Rige al Todo y surgiría el Todo mismo y aquellas proyecciones que son jerárquicas en el Todo Universal absoluto, ya sea la Ley, toda la potencialidad de la Creación, el Orden Universal inmanente y muchos otros aspectos que seguramente desconocemos y que podemos percibir como el Uno y el Infinito como una sola realidad, fusionados ambos como el principio y el fin de todo lo que existe. Mas que lo mencionado, quizás, no sea posible comprender de la Divinidad en la actualidad, pero como cada ser fue creado a imagen de esa misma realidad, como una nota musical Universal única, lleva en sí mismo, en su experiencia evolutiva y fundamentalmente en su relación intima con esa realidad Divina la posibilidad y la potencialidad de interpretarla, de interpretar algún aspecto de quien lo creo y lleva también en sí mismo la potencialidad de ampliar sus mismos márgenes porque para ello existe la Creación, para expandir el aspecto de perfección y realidad existencial del mismo Todo Universal cuando con la experiencia evolutiva de cada Ser, de cada Núcleo de Seres en su Reintegración Actúan en Amor Divino Universal.

Podríamos afirmar también que no podemos comprender mucho más allá de la realidad Divina que aquello que alcanzamos a percibir en lo individual en nuestra relación con la Divinidad, pero si podemos tener lineamientos hipotéticos de comprensión que en la Senda Evolutiva Infinita iremos ampliando con la asimilación de la Luz Divina Espiritual, Luz que, desde esas mismas esferas Divinas, desciende como un Rayo para que la creación se vaya sumergiendo en las Verdaderas Fuentes de la Sabiduría.

Cabe señalar que desde esas esferas incomprensibles brotan como proyecciones los principios básicos del Todo Creado y brota el Todo Creado mismo, el Todo creado Percibido y el Todo Creado no percibido, porque existen realidades Universales que son incomprensibles para nosotros. Cada punto de la arena de esos infinitos eternos que forman la Unicidad Divina podrían ser Universos Absolutos en sí mismos, Universos absolutos que tienden a la unificación y tienen a su vez Unicidades Cristicas Divinizadas que sean infinitos Núcleos de Soles Universales Divinizados en una dimensión desconocida e inalcanzable para nuestra mente, podrían ser como Todos que se Unifican en un Todo Universal Absoluto con otros infinitos Todos y nuestra realidad Universal estar transcurriendo dentro de una célula o un átomo de un Universo de Infinitos Universos unificados.

A esos niveles de la Divinidad llegan con la Evolución infinita todos los seres de la creación, creación que es una realidad continua que no se detiene. Si meditamos en los márgenes de lo que es perceptible para nosotros de la realidad universal, de los efectos de las causas, de las funcionalidades de la Vida, en lo externo a nosotros, en lo interno de nuestro organismo, en lo espiritual o desde cualquier esfera de percepción, vamos a percibir la perfección de todo lo espontáneo y natural de la vida universal, vamos a percibir la absoluta sincronización en los procesos cósmicos, naturales y de todo orden existente que proviene de lo que la realidad Divina provee al Todo creado y por lógica comprensión a todos los seres creados en todo punto del Universo.

Desde un punto de vista Universal de la existencia y considerando a los márgenes Divinos Creadores mencionados en líneas anteriores (Focos Creadores permanentes y transitorios en su realidad, temas que analizamos en apartados anteriores) podemos comprender que la maravilla de todo lo que existe es inmensamente más abarcante de lo que podemos percibir, que la existencia de un cosmos físico tridimensional es un aspecto de la creación que fue constituido por la Divinidad para que sea el vehículo de experiencia de infinitas chispas que siguen los márgenes evolutivos para alcanzar el punto de evolución que les permita reintegrarse y seguir la senda Divina evolutiva infinita, senda que nunca cesa en la eternidad de los tiempos sin tiempo de la existencia Universal.

Tal como analizamos en apartados anteriores, todo aquello que sirve para la evolución de la vida que involuciona-evoluciona, vale decir el Todo Experiencial, es creado por los Focos Creadores Transitorios que dan origen al Cosmos y todo su contenido como lo son los soles, los sistemas planetarios, planetas, astros y lógicamente el mismo tejido del espacio tiempo tridimensional donde se realiza nuestra existencia humana fluye dentro del Todo Experiencial desde Núcleos Descendentes de Fuerzas Primogénitas.

Los siguientes párrafos del Conocimiento de Madú Jess nos pueden ampliar aspectos en relación al Cosmos y su funcionalidad, desde una óptica que podemos definir como única y que nos puede otorgar un claro entendimiento desde una visión Universal del Cosmos: 

“Cada mundo, cada planeta, cada astro de los millones de mundos, planetas y astros que existen en el Universo están en un constante movimiento, movimiento que debe estar perfectamente armonizado con el movimiento de los otros astros, de los otros planetas; de los otros mundos. Esta armonía en el movimiento debe estar acompañada también de una armonización de la vibración que irradia cada uno de esos mundos, de esos planetas, de esos astros. La armonía es una Ley en la creación y en los Planos elevados todo es absolutamente armónico, pues sería imposible la vida en los Planos elevados si existiera la más mínima desarmonía. La armonía real, necesaria para la vida en los planos espirituales, constituye la base de la relación entre las diferentes entidades, así como constituye la base de la relación entre los diferentes astros, planetas y mundos.”


“El movimiento de los mundos no es un movimiento que podría llamarse físico, sino que es un movimiento invisible y que es producido por fuerzas espirituales, siendo el movimiento físico el efecto de causas de índole espiritual.”


Es absolutamente claro y perceptible que un orden tan perfecto no puede fluir de manera espontánea y autónoma, aunque si fluye por libre Albedrio dentro del margen de las Leyes que rigen la existencia. Conjuntos de Mentes Unificadas y Entidades Universales, desde las Esferas Espirituales, Rigen la funcionalidad de la Vida y de todo aquel escenario donde se sucede la Vida.

Siguiendo con los párrafos del Conocimiento de Madú Jess:

“Las mismas formas físicas que son percibidas físicamente en nuestro plano son formas espirituales en planos más sutiles y a su vez tienen origen en la Divinidad donde fueron creadas, lo mismo ocurre con las leyes físicas descubiertas por la ciencia, son reflejo de las leyes Divinas que Rigen el Universo, muchas de ellas son efectos de causas de origen espiritual, causas que son el reflejo o la manifestación de aspectos universales. Pensar en el sol como un instrumento de la manifestación Cristica.”


“La vida espiritual es vida de trabajo constante dentro de la Ley del Amor Universal y no hay una vibración por ínfima que sea, proveniente de ningún plano por denso o bajo que sea, que no llegue a los Planos elevados, que no sea percibida, y desde donde inmediatamente se proyecta la respuesta Amorosa, para la protección y guía de los seres y de los mundos que mediante esa vibración aun inconscientemente envían su reclamo y su pedido de protección a los planos desde donde llegarles esa protección y esa ayuda.


Una conjunción de Mentes Unificadas en Trabajo Universal en las Esferas Elevadas de nuestro universo, en los márgenes de la misma Divinidad se convergen en la más excelsa energía del Amor Divino Universal que es su realidad existencial, para crear y dar perpetuidad en fluidez continua a la Vida Evolucionante de acuerdo con las Leyes que todo lo Rigen y también a la Vida no Evolucionante que es su escenario vivencial.  Esto hace al Cosmos existente una infinidad de puntos de experiencia para aquellos Seres que tienen la gama de puntos de evolución en que les corresponde experimentar en dimensiones físico-experienciales cósmicas. Cabe señalar que el hecho de que nuestra vida planetaria sea más humana, material y arraigada al planeta tierra, no significa que, en otros mundos de este mismo nivel de la existencia, la experiencia de vida no pueda tener características cósmicas diferentes e incluso transdimensionales, vale decir que los Seres puedan manifestarse más allá del orden físico tridimensional que constituye la realidad percibida por nuestros sentidos físicos y que puedan desplazarse por el cosmos a distintos planetas.

El Todo creado fluye regido por una Ley Suprema de Armonía que rige los mundos en el Universo entero y que a su vez configuran un Todo Energético, un Todo donde cada planeta y cada humanidad tiene un destino dentro de ese orden Universal Armónico y una nota musical que aportar a lo que sería como una Melodía Universal del Todo Existente y que determina para las humanidades destinos Evolutivos conjuntos que son holones o sinergias que configuran el Destino Universal conjunto de los Sectores, del Universo en su totalidad y de la misma Divinidad que provee a toda la creación aquello que requiere para Armonizarse con la Realidad del Amor Divino Universal.

Párrafos del conocimiento de Madú Jess que nos otorgan mayor profundidad al respecto:

“Podemos determinar al Universo como conformado por diferentes “Sectores”, “Sectores” en los que la Vida se manifiesta bajo formas diferentes, pero con las mismas necesidades para su Evolución. Nuestro Mundo pertenece a un Plano en el cual Evolucionan y están en el mismo “punto” Evolutivo muchos otros Mundos y sus humanidades, en el “Sector” al cual pertenece la Tierra y en otros “Sectores” del Universo, vale decir que el Plano en el cual se encuentra la Tierra incluye no solamente Mundos de ese “Sector” del Universo sino también Mundos de otros “Sectores” del Universo.”


“La Vida al manifestarse en el Universo lo hace dentro de la Ley que determina necesidades exactamente iguales, en esencia, para la Evolución de los Seres de todos los Mundos en el Universo. En consecuencia, aun cuando bajo diferentes aspectos, la Evolución se desarrolla en los diferentes “Sectores” del Universo de acuerdo con iguales necesidades Espirituales.”


“Esos Mundos en los cuales se desarrolla la Vida en otros “Sectores” del Universo en los cuales la Evolución está en el mismo “punto”, es decir que están en el mismo Plano de Evolución que la Tierra, también tienen humanidades y decimos humanidades para significar la “Especie” que, en el proceso de su Evolución, ha llegado al “punto” en que se encuentra el ser humano, como Espíritu y como “forma”.


“También en esos otros Mundos, más allá del “Sector” del Universo en que está ubicado nuestro sistema planetario, existen humanidades, es decir, Seres Espirituales que están Experimentando en Conjuntos inteligentes, de una inteligencia similar a la del ser humano, Seres que tienen Libre Albedrío y Conciencia, aunque no debemos imaginar a esos Seres con “forma” igual a la del Humano terreno.”


“El “ambiente” de los Mundos de diferentes “Sectores” del Universo difiere por completo, y por lo tanto todo lo que es vibración física tiene expresión completamente distinta.”


Podemos apreciar con mayor profundidad lo omniabarcante del universo y fundamentalmente comprender que las diferencias son ventanas de expresión de la vida que tienen un único origen Divino y que nunca podrán ser objeto de separación, sino que universalmente son, por Ley de Armonía Universal, tendientes a la Unificación absoluta en el Amor Divino que creo todo lo que existe y así como todo lo existente en el universo debe ser nuestra vida humana, nuestra vida de relación, nuestra expresión en el mundo, nuestro pensar, sentir y lógicamente nuestro actuar frente a todo lo que nos rodea y que es Vida Universal creada.  

Los siguientes párrafos del conocimiento de Madú Jess nos enuncian las realidades en torno a vivir en los márgenes de la Ley:

“Mientras en un Mundo exista individualismo egoísta y sus derivaciones negativas, hay en él necesidad de Dolor. Una vez superado el individualismo, por la Purificación del Mundo, puede conservarse todavía la individualidad de “forma”, aunque Espiritualmente todo esté ya Fraternalmente unido en Trabajo de Bien. En ese “punto”, los más avanzados Trabajan para impulsar el Progreso de los menos adelantados, pero no con Dolor. En el Universo todo, persiste siempre la necesidad de Progresar constantemente y a los Mundos que están en ese “punto”, los Seres van para realizar Experiencias de Bien que les proporcionan Progreso. Solamente en un período de la Evolución puede haber necesidad de Dolor, por haberse producido las Causas que lo motivan; pero, superado ese período, los Seres continúan Trabajando en el Progreso Evolutivo, sin Dolor.”


“Si aprendéis a AMAR, tendréis la Fuerza mayor, porque el Amor es la fuerza más grande del Cosmos, la fuerza que todo lo creo. Amar significa, Amar a los seres humanos y también Amar a la Naturaleza en todas sus manifestaciones, Naturaleza a la que debemos acercarnos cuantas veces nos sea posible. Amemos, en fin, al Cosmos y Amemos a Todo, Todo lo Creado. Aprendamos, así, a Adorar a Dios, en el Altar de la Armonía Universal.”


“Todo está inscripto en la Divinidad, al igual que en la semilla está inscripto el árbol y sus frutos. Divinidad... Todo es la Divinidad. Su Manifestación constante en los infinitos Planos..., en los Eternos “momentos” de Evolución..., en las infinitas formas siempre dinámicas que va adoptando, también, en Planos físicos Universales... Manifestación que estaba ya inscripta en el Seno de la Divinidad. Manifestación Divina que, en Irradiación constante de Sí Misma, se despliega en Amor y por Amor en el Orden Cósmico Universal en el cual Vibra la Vida... Cristos, Seres, Mundos, Galaxias, Sectores... la Creación toda. Así como también está el organismo íntegro y todas sus funciones en los primeros instantes de la conformación de la célula madre del futuro ser humano adulto. Es siempre la Divinidad Manifestándose a través de Sus Leyes que jamás permitirán el caos.”


La Ley es existir en la expresión de la Energía que creo todo lo que existe, no existe otra realidad para seguir la senda evolutiva. Si bien la Divinidad nos creó con Libre Albedrío, ese Libre Albedrío está enmarcado en las Leyes que Rigen todo lo creado y en la necesidad de la Armonía Universal. Podemos hacer lo que queramos, aun obrar en contra de la Ley, pero ello tiene el mismo limite que enuncian las Leyes y ese límite es el karma de nuestros semejantes, el Amor Divino y la Armonía que debe Regir en todo ámbito del Universo, tema este que profundizaremos en apartados siguientes.

Enunciamos a continuación más párrafos del Conocimiento de Madú Jess que nos describen el Cosmos, los mismos amplían nuestra percepción de realidad cósmica y planetaria desde una óptica Universal de la existencia:

“La tierra, como todos los astros del Cosmos, contiene fuerza cósmica que en términos espirituales deberíamos denominar "Fuerza Divina", que al condensarse en materia ha trasmutado sus cualidades inherentes a su estado sutil en cualidades correspondientes a su nuevo estado condensado conformando así un foco de radiación y atracción dentro del cual vive la forma en el planeta y cuya influencia y acción impide o dificulta la acción de la radiación o magnetismo cósmico, o sea la misma fuerza en estado de mayor pureza, que llega del Espacio a la Tierra a través del Sol, dentro de cuya acción é influencia directa se desarrolla la vida física del planeta y que también actúa como elemento trasmisor de determinadas Vibraciones Espirituales que el mundo debe recibir.


“En la formación de nuestro mundo, el Sol ha tenido una acción importantísima y su acción continúa a través de los milenios. El Sol tiene acción física en nuestra Naturaleza y en el aspecto físico del ser humano, y tiene Acción Espiritual en la Vida que Vibra en nuestra “forma” humana.”


“Todo lo que os rodea como elemento natural, como algo que no ha realizado el hombre, como algo que no ha fabricado el hombre, todo ello es siempre manifestación de Fuerza Divina, de Poder Divino, es una condensación de esa Fuerza y de ese Poder de Dios, y entendemos que Dios pone Su Fuerza junto a vosotros solo para que la uséis para el bien, para que la utilicéis dentro de la Ley del Amor Universal que a 'todos nos rige. Es cierto que tenéis vuestro libre albedrío, pero no imaginéis jamás que el libre albedrío os autoriza para todo, el libre albedrío como todo lo que existe, está regido por las Leyes Divinas, y todo lo que hagáis, en virtud de esa libertad que Dios os ha concedido, es regido por esas Leyes y por lo tanto si es bueno os responderá con bien, si es malo os responderá con dolor.”


“Los Elementos, de los cuales vosotros hacéis uso sin pensar en nada más que la satisfacción de vuestras necesidades, de vuestros gustos y muchas veces de vuestras inclinaciones más oscuras, son recordadlo bien, Fuerzas Divinas puestas al servicio del hombre para su progreso y para su evolución. Fuerzas que parecen dormidas, como parece dormido todo lo que os rodea en vuestro plano.”


Es nuestra dimensión cósmica, ósea, el espacio físico tridimensional, el tejido del espacio tiempo en donde se desarrolla nuestra existencia física, una Creación Divina de absoluta perfección en su constitución como Energía Divina Condensada, como así también lo es en relación con su funcionalidad, la cual se desarrolla en perfectos sincronismos impulsados por Seres Elevados que guían los procesos cósmicos y naturales en conexión jerárquica con la Divinidad creadora. Sincronismos estos que permiten la fluidez exacta y la manifestación de las leyes que todo lo rigen en cada ser que se encuentre experimentado en cada parte del cosmos, en cada astro, planeta y dentro de ellos en cada reino de la naturaleza, dentro de cada especie y en los seres humanos.   

Todo ello se sucede, como analizamos en apartados anteriores, bajo la guía del Núcleo Crístico inmediato que guía nuestra evolución espiritual y que constituye el Canal de la Divinidad para nuestro punto de existencia. Cabe señalar que en lo físico es el sol la estrella de mayor relevancia para nuestra existencia cósmica, como lo cita el siguiente párrafo del Conocimiento de Madú Jess:

“La Energía Universal “desciende”, así, en Escala Crística y desde el Cristo “Directo” es Proyectada al Sol, que proyecta la Energía Universal “Reclamada”, que, tras las sucesivas “adaptaciones”, la última en el propio Sol, es recibida por los aspectos de “forma” en los Planetas de su Sistema en el “punto” exacto que dichos aspectos de “forma” la necesitan.”


Cabe también mencionar, que, así como en lo cósmico se puede apreciar lo Divino, en la constitución de nuestro organismo, en la perfección de la manifestación que permite al ADN de las células desarrollar un cuerpo físico que tiene funcionalidades autónomas maravillosamente exactas y que permite la manifestación en lo material de la consciencia espiritual, también puede apreciarse la Divinidad, tal como cita el siguiente párrafo de Martha, hija de Madú Jess: 

“Sos una representación exacta del Universo completo y estudiándoos a vosotros mismos a la Luz de las Enseñanzas que vas recibiendo, aprenderéis a comprender la Creación, a comprender la relación que existe entre cada planeta, entre cada ser, entre todo lo que Dios ha creado, cuando estudies la relación que existe entre cada uno de vuestros órganos, entre cada una de vuestras células y entre todo lo que conforma vuestro propio ser conjunto, espiritual y físico.”